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Comentarios sobre los comentarios de los intelectuales cubanos
Malime
Al leer los comentarios realizados por estos intelectuales, me sentí necesitado de manifestar los propios en la sana preocupación y pretensión crítica que a todos nos animan realizarlos, con el modesto intento de tras la experiencia personal vivida, rescatar la semejanza de situaciones en cuanto al alejamiento que el pueblo cubano y el entonces pueblo “soviético” manifiesta y manifestaban cada uno a su forma, sobre el proceso revolucionario en sus respectivos países socialistas.
Cuba: Constitución y peligros
Malime
No es el partido el que tiene que ejercer el poder estatal, no es el que tiene que salvaguardar los derechos económicos de los trabajadores, sino los propios trabajadores cubanos organizados como clase dominante los llamados a realizarlo directamente.
Debate para el Taller del 28 de febrero de 2006 |
Dictadura del proletariado: ¿Estado vertical o gobierno descentralizado?
Malime
Programa de talleres bimestrales en Cuba: “La Obra de Carlos Marx y los Desafíos del Siglo XXI”
2006 Febrero 28: La construcción de un poder revolucionario: experiencias socialistas y prácticas emergentes actuales
El término dictadura generalmente se asocia a la imposición violenta de un sistema político, a la falta de democracia, a la forma de poder que se impone por vía militar. Lo que nos provoca el repeler la palabra dictadura. Sin embargo en el mundo que nos toca vivir, donde la explotación del hombre por el hombre da lugar a las desigualdades sociales y económicas que existen entre colectivos sociales e incluso dentro de un mismo colectivo, aun viviendo en las denominadas “democracias” capitalistas existe la objetiva realidad material de la dictadura de unos colectivos sobre otros, e incluso dentro de colectivos sociales explotados por los colectivos que ostentan el poder también se produce la dictadura que se manifiesta en la insolidaridad de clase de unos trabajadores sobre otros, lo que impide el poder conseguir la necesaria unidad que permita a la clase oprimida la lucha contra el colectivo opresor.
Comentarios al trabajo de Luis Marcelo Yera
Malime
Sin tener el necesario conocimiento sobre China y Vietnam, por los datos económicos que nos ofrecen la prensa internacional, podemos considerar que en esos países donde siguen hondeando banderas rojas, lo que impera es el sistema de producción y de mercado capitalista, aunque bajo la protección de una autocracia partidista que se dice comunista. Un socialismo, no dictatorial de clase, (desde la concepción marxista del estado), con un sistema económico capitalista.
Debate
sobre El marxismo occidental (Rebelión - Cuba Siglo XXI) |
El
marxismo occidental
Manuel Góngora
22/01/2005
Cuando se habla del “marxismo occidental” o “europeo”,
se hace atendiendo a los criterios diferenciados con el llamado
“marxismo soviético” o “ruso”. Diferencias
que se sustentan, según sus autores, en el enriquecimiento
de los principios en unos casos y en una explicación más
fidedigna de la filosofía de Marx y Engels en otros. En este
caso, nos surge la pregunta clave: ¿Puede el marxismo ser
objeto de interpretación y de aplicación variada y
contradictoria?
Respuesta
a Manuel Góngora: Acerca del Marxismo occidental
Malime
26-01-2005
La verdad es que esa nueva formulación del marxismo ruso
y occidental suena un tanto rara. Suena como si el marxismo fuese
un dogma de fe, donde, a semejanza del cristianismo ortodoxo o católico,
se le define como occidental o ruso (oriental) siguiendo el ejemplo
geográfico de la religión.
Polémica
sobre el "marxismo occidental": ¿A quién
refuta Malime?
Manuel Góngora
28-01-2005
Cuando leemos lleno de prejuicios o desde la atalaya de la suficiencia,
pocas reflexiones de crédito nos pueden alumbrar. Todo aquél
que se atreve a escribir y mucho más sobre el marxismo, está
expuesto a la controversia y con ese riesgo envíe mi "El
Marxismo Occidental" a Rebelión. Esperaba la refutación,
para iniciar un proceso de discusión que diese pie al debate
sobre cuestiones de actualidad que deben ser atajadas con urgencia,
pues estamos en ese período de reflexión y de actualización.
Acerca
de a quién refuta Malime (Polémica con Manuel Góngora)
Malime
30-01-2005
En todo mi discurso pretendía dos cosas, por un lado intentar
desmitificar el pretendido enfrentamiento “marxista occidentalista”
que algunos atribuyen a Gramsci con el leninismo (ruso), de ahí
las frases que reproducía del propio Gramsci. Claro que cada
uno somos muy libres de resaltar y dar importancia y conclusión
global a lo que conozcamos e interpretemos de ambos teóricos
dado el grado de lectura y comprensión que cada uno realizamos
de ellos.
Gramsci y el marxismo occidental
Respuesta a Manuel Góngora
Eduardo Núñez y Albert Escusa
10-03-2005
El compañero Manuel Góngora ha iniciado un interesante debate acerca de la contraposición entre los llamados por él “marxismo soviético” y “marxismo occidental”. No obstante, consideramos que aspectos de sus análisis son unilaterales y erróneos cuando sitúa a Gramsci, en bloque junto a Lukács, como los padres intelectuales de las corrientes reformistas y socialdemócratas modernas en occidente. No nos detendremos a repasar la postura de Lukács, muy marcada por las oscilaciones filosóficas e ideológicas y por una práctica política muy discutible desde el marxismo. Pero sí creemos imprescindible reivindicar a Gramsci como filósofo marxista, a Gramsci como profundamente revolucionario y mostrar algunos aspectos de la continuidad de su pensamiento con el de Lenin.
(Documento pdf)
Respuesta a Eduardo Núñez y Albert Escusa
A vueltas con el "marxismo occidental"
Manuel Gongora
12-03-2005
Los compañeros Eduardo Núñez y Albert Escusa basándose en mi artículo "El Marxismo Occidental" han abordado con gran interés el estudio de la vida y obra de Gramsci y sus repercusiones, con el fin de demostrar el carácter marxista-leninista de su pensamiento bajo la tutela de una crítica, entiendo que desaforada y a veces distorsionada de dicho artículo, extrayendo conclusiones extremistas sobre mi posicionamiento al respecto, que no se corresponden con la realidad, dado que la mar de veces se especula con que si Góngora quiere decir tal cosa, entonces lleva razón y si no, no la lleva y nos conduce a.. y también se afirman sobre la base de "exprimir" concisos párrafos (Bujarin, Frentes Populares) que Góngora ha dicho lo que realmente ni es su intención y ni siquiera dice.
Entre Eduardo Núñez y Albert Escusa contra Manuel Góngora
¿Debate crítico sobre Gramsci? O algo más...
Malime
15-03-2005
En esta polémica que tenemos también afloran diferentes interpretaciones, y lo más importante, lo que se esconde detrás de ella: la confusión sobre el papel del partido y las masas trabajadoras, la lucha por el poder y la forma en que se constituye el nuevo poder alternativo del proletariado organizado como clase dominante, partiendo de la realidad que nos toca vivir, no tan lejana, aunque si muy agudizada de la que le tocó vivir a Lenin; de la tremenda confusión existente sobre la función histórica del Estado y la Democracia, en la fase súper-imperialista del capitalismo, donde el dominio ideológico que se ejerce en los países más desarrollados sobre el conjunto de la sociedad, impide la objetiva respuesta revolucionaria.
El
chavismo no debería ser el problema si tuviera una coherencia
ideológica que lo unificase
Malime
Enero 2005
En algún momento la estructura
del estado capitalista tendrá que ser liquidada para imponer
la que de forma paralela se está creando, pero nunca podrán
convivir eternamente el capitalismo y el socialismo. En cuanto el
pueblo mayoritariamente se haya constituido en clase dominante,
podrá asumir el poder, socializar y administrar las fábricas
expropiadas a los capitalistas.
Debate
sobre el papel de la ideología en Cuba
Malime
Agosto 2004
Sin disponer de un conocimiento directo
de la realidad cubana, Machado, en su exposición, me induce
a interpretar que realiza un detallado análisis de la situación
de Cuba, sin embargo, al comparar su análisis con la ideología
marxista en la transición socialista cubana, pienso que elude
aspectos fundamentales, básicos de esta ideología
respecto a la función histórica del Estado y la Democracia,
es decir sobre la cuestión del poder desde una posición
clasista, lo que los teóricos denominaban: la organización
como clase dominante, la naturaleza y sentido del Estado. Considero,
intuyo, que tal vez dadas las tristes experiencias anteriores de
poder socialista, le induce a poner en duda cualquier propuesta
organizativa de poder, llevándole a confiar en el espontaneísmo
del proceso revolucionario cubano, sin las necesarias consideraciones
sobre las experiencias históricas en los procesos de cambio
de sistema y de poder, o de los fracasos de poder con vuelta al
sistema capitalista, como hemos podido ver tras la caída
del llamado socialismo real.
Debate
sobre el marxismo a partir de un artículo del ponente
Jordi Soler Alomá: "El marxismo ¿es una ciencia?" |
Debate, en orden cronológico, sobre el
marxismo a partir de un artículo publicado en Rebelión
por Jordi Soler Alomá, después de participar en la
II Conferencia con la ponencia "Sociedad
y alienación: vigencia de los planteamientos de Marx en el
análisis del mundo actual"
El
marxismo ¿es una ciencia?
Jordi Soler Alomà
Agosto 2004
Existe la creencia bastante difundida que el
marxismo es una ciencia. Por ejemplo, ante los problemas de la humanidad,
hay quien tiene una fe ciega en que la ciencia del marxismo los
va a resolver. Veamos qué hay de cierto en dicho supuesto: Para
que la proposición "el marxismo es una ciencia" tenga sentido, debemos
establecer, antes que nada, el significado -que debemos consensuar-
de marxismo, por un lado, y de ciencia, por el otro;
entre otras cosas, porque ninguno de los dos conceptos es ajeno
a la controversia.
Respuesta a Jordi Soler Alomà
Si el
marxismo no es una ciencia... ¿Qué es?
Víctor Morales
Agosto 2004
Antes de entrar en la cuestión que se
ha planteado, es interesante recordar que a la hora de entrar en
debates de este ámbito, hay que tener presente que no se
está discutiendo del traje de boda de Letizia, ni del final
de la liga de fútbol. Se está discutiendo sobre cómo
arreglar los problemas que nos afectan día a día.
Quedan muy estériles las aportaciones teóricas, si
no van acompañadas de una puesta en práctica coherente,
o al menos de un intento. Están deslegitimadas disertaciones
sobre qué es el marxismo, sin intentar de un modo u otro,
llevarlo a la práctica; porque si hay algo evidente en el
marxismo es que no es una interpretación del mundo, sino
una guía para la acción. Ambas ramas de la lucha revolucionaria
deberían estar presentes en todo aquél que pretenda
enriquecer estos debates.
Réplica a la respuesta crítica
de Víctor Morales
Si el
marxismo no es una ciencia, es que es otra cosa
Jordi Soler Alomà
Agosto 2004
La lectura de tu repuesta me hace pensar que
he planteado el problema de modo poco claro. Tendría que
haber tratado, por separado, qué es el marxismo y el carácter
científico de la obra de Marx. La cuestión es que
oigo y leo, en muchas ocasiones, la caracterización del marxismo
como ciencia sin una previa definición del marxismo, por
lo que me he visto obligado a intentar "matar dos pájaros
de un tiro". Convendrás conmigo en que, antes que nada,
hemos de saber de qué estamos hablando. Yo estoy de acuerdo
con Marx en que a él no lo podemos incluir en el batiburrillo
del marxismo; y conozco profundos estudiosos de la obra de Marx
-por cierto: no abundan- que por nada del mundo quisieran verse
honrados compartiendo el mismo estandarte que ciertos elementos
que han ido por la vida de marxistas y que han publicado libros
que han sido ampliamente difundidos sin haber leído -o sin
haber entendido nunca- El Capital (por no hablar de los que nunca
han leído directamente a Marx).
¿Es
el marxismo una ciencia?
Francisco Umpiérrez Sánchez
Agosto 2004
En el ámbito del pensamiento filosófico
contemporáneo suele entenderse por ciencia sólo a
las ciencias naturales. ... La mejor manera de atacar a este escepticismo
no es mediante grandes disquisiciones teóricas, sino formulándole
una pregunta de importancia práctica capital: ¿es
posible analizar científicamente por qué unos hombres
son inmensamente ricos y otros infinitamente pobres? Les digo de
antemano que la economía convencional no da respuesta a esta
pregunta, ni tan siquiera se la plantea. ¿Y por qué
no se la plantea? Porque defiende la tesis de que la pobreza es
un problema ético. Esto implicaría que la solución
del problema de la pobreza quedaría en manos de la conciencia
solidaria de los ciudadanos y del Estado, esto es, quedaría
sin solución. Además, no se trata de que los capitalistas
practiquen la caridad con los trabajadores, sino que los primeros
devuelvan la riqueza que pertenece a los segundos.
Réplica a ¿Es el marxismo una
ciencia? de Francisco Umpiérrez
Aún
sobre marxismo y ciencia
Jordi Soler Alomà
Agosto 2004
Según Marx, el intercambio de fuerza de
trabajo por salario es un intercambio de equivalentes. Es decir,
el señor capitalista compra en el mercado la mercancía
fuerza de trabajo (que es mercancía humana) por lo que vale,
por su precio de mercado —y puede comprar esta mercancía
porque, por los motivos que sea, nos vendemos a nosotros mismos—.
Si bien es cierto que durante el disfrute de esta mercancía
por parte de su propietario —el capitalista— se genera
más valor que el propio de la mercancía que ha comprado,
eso forma parte del funcionamiento del capitalismo, que es la sociedad
en que vivimos, y es legal y aceptado por ambas partes —a
pesar de que, a efectos éticos, el trabajo asalariado (la
compraventa de personas) es de la misma naturaleza que la prostitución
(pero en nuestro sistema es la norma)—. Por tanto, en buena
ley, el capitalista no tiene que devolverle nada al vendedor de
fuerza de trabajo, que, además, es copartícipe en
el proceso de reproducción del capital. La única solución
es la desaparición de las clases y el cambio de sistema;
no que el capitalista, en un ataque de altruismo, reparta la riqueza
entre los trabajadores.
(Documento pdf 34 kb)
Respuesta a "Aún sobre marxismo
y ciencia" de Jordi Soler
¿Es
el marxismo una ciencia? (2)
Francisco Umpiérrez Sánchez
Agosto 2004
Lo que yo mantengo, siguiendo a Marx, es que
hay que decir con voz alta y clara: el alquiler, el interés,
los impuestos y los beneficios son frutos del trabajo y pertenecen
en propiedad a los trabajadores. Es cierto que en el mercado se
intercambian equivalentes, se paga una determinada suma de dinero
por el valor de la fuerza de trabajo, pero en la producción,
además de crear su salario, el trabajador crea el alquiler,
los impuestos, los intereses y los beneficios. Así que reclamar
el derecho de propiedad de los trabajadores sobre todas las formas
de la plusvalía es de justicia y revolucionario. No creo
que sea correcto decir que la apropiación por parte del capitalista
de las distintas formas de plusvalía sea aceptada por los
trabajadores, como mantiene Soler. Todo lo contrario: la conciencia
habitual cree que las distintas formas de la plusvalía son
creadas por el capital y no por el trabajo.
Marx, de la
mitología al paradigma científico
Eduardo Núñez
Enero 2005
El materialismo de Marx implica el reconocimiento de la existencia
de la materia independientemente de la conciencia, como realidad
objetiva, así como la asunción de una determinada
relación entre ser y conciencia, materia y pensamiento, que
se resumirá en la célebre frase “No es la conciencia
la que determina el ser social sino el ser social el que determina
la conciencia”
Crítica
a Principio o fin del socialismo, de Manuel Castro Formento
Malime
Marzo 2004
El autor da por supuesto, puesto que cayó la URSS, que no
era válido el modelo soviético, que no contó
con una fundamentación científica, que no se ajustó
a las condiciones del desarrollo de las fuerzas productivas. Sin
embargo entra en una tremenda contradicción, porque es evidente
que la revolución si tuvo lugar y el zarismo y el capitalismo
fueron derrocados. Los soviets, ese modelo que niega, sí
respondió a los fundamentos de la revolución, a cómo
se tenía que organizar la lucha antisistema con la democracia
directa y participativa que era el soviet. Se enreda con lo que
sucedió después de la revolución. Además
de sin decirlo, considerar a Lenin, como lo hicieron los reformistas
de su época, un aventurero por haber defendido el soviet
frente a la Duma. Olvida que fue el propio Lenin el que dijo que
en Rusia no se daban las condiciones objetivas para que el socialismo
pudiera mantenerse. Y debería preguntarse porqué lo
dijo, y porqué no retornó a la forma clásica
de la democracia parlamentaria burguesa.
Debate
sobre dos artículos de Marta Harnecker en Rebelión,
de su serie "Ideas para la lucha" |
[7]
Razones del escepticismo popular respecto a la política y
a los políticos
Marta Harnecker
Enero 2004
Polémica con Marta Harnecker - Ideas
para la lucha (7)
El
creciente escepticismo popular
Malime
Enero 2004
[8]
La derecha suele fijar el calendario de las luchas de la izquierda
Marta Harnecker
Enero 2004
Comentarios
sobre Ideas para la lucha [8] de Marta Harnecker
Malime
Febrero 2004
Un artículo
sobre Harnecker y el golpe
Clase Contra Clase (Chile)
Julio 2003
Las acciones en conmemoración a 30 años
del golpe comienzan lentamente a multiplicarse. Mientras el Gobierno,
la Concertación, la derecha, las FFAA, la Iglesia, los medios
de comunicación de masas, intentan sepultar la más
grande gesta del pueblo trabajador de nuestro país, las distintas
organizaciones de los trabajadores debemos recuperarla como fuente
de enseñanzas. Qué enseñanzas rescatamos, es
parte necesaria del debate dentro de las distintas organizaciones
de la izquierda.
Presentada en la Conferencia Internacional la
Obra de Carlos Marx y los Desafíos del Siglo XXI. La Habana,
5 al 8 de mayo de 2003
Sobre
los conceptos de "Ser social y Conciencia social"
Galvarino Araneda
Junio 2003
En la necesidad de unirse los afectados
por el sistema, nos damos cuenta que conformar algo colectivo tiene
muchas dificultades, en lo práctico sobre todo, por la ideología
predominante, que privilegia el individualismo a toda escala y no
permite las organizaciones colectivas. Tambien es difícil
por que nuestra teoría marxista no ha podido responder a
estas necesidades del siglo XXI, y que unas de sus principales características
ha sido la atomización de las organizaciones sociales y productivas.
Pero el hecho está ahí, y que son las 283 856 microempresas
en todo el país y las 61 337 pequeñas y medianas.
No podemos constituir sindicatos, pero sí asociarnos para
enfrentar a la gran empresa. Imaginense que mas del 90% del empleo
lo da la micro, pequeña y mediana empresa.
Dirigente gremial de pequeños empresarios
en Chile
Debate
sobre los cambios aprobados en la Constitución de la
República de Cuba |
Atendiendo a personas que se han dirigido a nosotros
para conocer acerca de los cambios aprobados recientemente en la
Constitución de la República de Cuba, publicamos este
trabajo de la Doctora en Derecho Marta Prieto.
Funciones
de la Constitución
Martha Prieto Valdés
Marzo 2003
Si la acción social de un fenómeno
está directamente condicionada por su propia esencia, el
análisis de la Constitución en su integridad, en tanto
fenómeno complejo o múltiple, nos lleva a admitir
que, además de prescribir el deber ser jurídico-político,
actúa además en lo ideológico-cultural, social
y económico, lo que la hacer ser peculiar respecto a las
disposiciones normativas infraconstitucionales y marca además
la singularidad de sus funciones respecto a los Ordenamientos jurídico-político
y la sociedad civil en general.
Acerca
de una interpretación del Manifiesto Comunista
Malime
Octubre 2002
Existe bastante confusión en el movimiento
comunista internacional sobre la función histórica
del estado y la democracia. Conviene recordar que Stalin derogó
la constitución soviética el 11 de junio de 1.936.
De estado soviético en la posterior constitución solo
quedó el nombre, el concepto y práctica leninista
de democracia directa fue arrojado al basurero. Ello explica como
fue posible que después de más de 70 años de
revolución socialista, el pueblo aceptase sumisamente retornar
a un capitalismo brutal y despiadado. El
Manifiesto Comunista, también tiene una lectura socialdemócrata.
El auge del neoliberalismo y el hundimiento ideológico y
político de los partidos comunistas son una realidad objetiva,
contrastable, que se impone sobre cualquier otra consideración.
El
Poder de la democracia
Malime
Noviembre 2002
Sociológica y económicamente hablando
los que tienen poder económico gozan de democracia, objetivamente
se sienten libres porque son libres para comprar y consumir, explotar,
mandar, castigar y ejercer su cuota de violencia contra los más
débiles económicamente. Algunos de los que no tienen
poder económico pueden creerse vivir en democracia cuando
hacen abstracción de su realidad socioeconómica, pero
su situación es muy lamentable: inseguridad laboral, recortes
sociales y económicos son la luz que alumbra el despertar
de cada día de todos aquellos que depende su subsistencia
de la venta de su fuerza de trabajo. Las palabras e ideas abstractas
sin concreción material dan lugar a interpretaciones idealistas
muy subjetivas que no se corresponden con la realidad objetiva.
Vanguardia,
conciencia, estrategia revolucionaria y la propuesta de Marta
Harnecker
Esperanza Patriótica
Marzo 2002
Después de la derrota del movimiento revolucionario en
América, luego de la muerte del Che y del derrumbe del
ensayo soviético; la Vanguardia y la Conciencia revolucionarias
han ocupado el centro de las discusiones de los revolucionarios.
Una crisis de identidad cubrió como una neblina espesa
el ánimo de los teóricos, que no encontraron mejor
salida que enfilar todo su entendimiento contra la Vanguardia,
erigida ésta en máxima culpable de todas las desdichas
pasadas y las por venir, de tal manera que disolviendo la Vanguardia
e ignorando a la Conciencia revolucionaria se corregirían
todos los entuertos. Se comportaron como el alemán que
frente a la infidelidad vendió el sofá. Nosotros
en Esperanza Patriótica pensamos que el punto no está
agotado y por eso queremos participar en la polémica.
Marta
harnecker responde sobre: Vanguardia, conciencia, estrategia
Abril 2002
Cuarenta años no han transcurrido en vano. La izquierda
de hoy no es la misma que ayer. Los acontecimientos señalados
han dejado sus huellas. Los sectores más receptivos han
aprendido de aciertos y derrotas y se preparan para enfrentar
los enormes desafíos que les plantea el Tercer Milenio.
Este se inicia con una correlación de fuerzas mucho más
negativa que hace cuarenta años. La derrota del socialismo
en Europa del Este y la URSS no sólo cambia drásticamente
la correlación de fuerzas a favor de las fuerzas más
reaccionarias transformando a los Estados Unidos en la potencia
hegemónica sin contrapeso, sino que al mismo tiempo hace
desaparecer del horizonte el principal referente práctico
de la izquierda en su lucha por el socialismo.
Conciencia
reformista y conciencia revolucionaria
Esperanza Patriótica
Mayo 2002
En Esperanza Patriótica, hemos recibido
con mucho agrado la respuesta de Marta Harnecker a nuestro artículo:
"Vanguardia, Conciencia, Estrategia Revolucionaria y la propuesta
de Marta Harnecker." Le agradecemos, ella abre las posibilidades
de una beneficiosa discusión en el seno de la izquierda.
Réplica
a tres reacciones
Luis Marcelo
Mayo 2001
Marcelo responde a las reacciones generadas por su artículo
"Repensar empresarialmente a Marx", publicado en la
edición de febrero 2001 de Cuba Siglo XXI. El debate en
el periódico electrónico Rebelión generó
cuatro artículos:
En
réplica a la reacción de Luis Marcelo Yera
Malime
Julio 2001
Coincido contigo en tu afirmación sobre la incomprensión
existente sobre la teoría marxista entre los que nos consideramos
defensores de esa cultura, -así nos va al movimiento comunista
internacional y al conjunto de la humanidad-, y en la necesidad
de "poner fin a esta deplorable situación". Desgraciadamente
salvo vosotros en Cuba, en vuestro partido ese debate lo podéis
hacer, pero el debate ideológico en mi partido el PCE es
imposible. Existen cauces formales para realizarlo, pero la realidad
es que en la práctica no se realiza.
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