Entrevista
a Awni al-Kalamyi*, portavoz de la Alianza Patriótica
Iraquí
'La resistencia
iraquí no es al-Qaeda'
Ana Zarzuela**
CSCAweb
(www.nodo50.org/csca), 2 de abril de 2004
Ana Zarzuela, Madrid, 21 de marzo de 2004
Traducción del árabe: Iñaki Gutiérrez
de Terán
"Estamos
resistiendo al invasor. Nuestros dos objetivos principales son
expulsar a la ocupación y crear un sistema democrático
que permita la reconstrucción del país, rehacer
la economía, asegurar los derechos individuales y colectivos,
rehabilitar los derechos de las mujeres, crear un país
independiente que no esté sujeto a la injerencia exterior;
un país en definitiva democrático, libre y soberano"
Pregunta (P): ¿Cuál
es la situación en Iraq un año después de
la intervención militar de la coalición?
Respuesta (R): Lo que suelen dejar todas las ocupaciones
es un desgaste y una gran falta de desarrollo para el país
ocupado. Por eso es normal que veamos que un año después
de la invasión sigue habiendo inseguridad y muchos problemas.
Ello es normal también porque a la ocupación le
interesa que haya una situación de tensión y de
inestabilidad para justificar su presencia en el país.
Hay que tener en cuenta además
que la ocupación estadounidense no deja de ser una nueva
experiencia colonialista. Sin embargo, hay que establecer diferencias
entre el colonialismo británico, francés o portugués,
y [este nuevo] neocolonialismo estadounidense. El francés
se caracterizó en algunas etapas por el intento de desarrollar
la sociedad donde vivía, de crear infraestructuras; mientras
que el colonialismo portugués lo que hizo fue arrasar
lo que había, crear algo nuevo y dominar a partir de su
presencia militar. En cambio, el colonialismo británico
era una especie de mezcla entre los dos, un dominio político
poderoso y un dominio militar igualmente poderoso que intentaba
compaginar las dos vertientes.
Por el contrario, la ocupación
estadounidense se basa ante todo en la fuerza, en la brutalidad
y en el desprecio de las organizaciones internacionales. Este
colonialismo es nuevo en el sentido de que desprecia todas las
leyes que podrían encauzar su sistema de ocupación.
Y además tiene una particularidad hasta ahora inédita,
su vinculación con Israel. En realidad lo que desea Israel
en este nuevo Iraq es evitar que resurja una nueva sociedad,
un nuevo Estado, un país poderoso; a Israel le convendría
que se destruyese totalmente Iraq, o por lo menos que no volviese
a levantarse. Y en ese sentido es cierto lo que se está
diciendo en muchos sitios, incluso en EEUU, acerca de que la
ocupación de Iraq se ha llevado a cabo más con
vistas a favorecer a Israel que a favorecer los intereses inmediatos
de EEUU.
P: El caos general y la
falta de control del Consejo Gubernativo (CG) iraquí y
la Autoridad Provisional de la Coalición (APC) , ¿hasta
qué punto se deben a sus propios errores o a un éxito
de la resistencia?
R: El CG es un instrumento creado por las fuerzas
de ocupación tres meses después de haber ocupado
el país. Lo nuevo no son los individuos que lo componen
-que son personas que ya colaboraban con EEUU desde hace años
[1]- si no el instrumento [en sí].
Recordemos que cuando las fuerzas
ocupantes entraron en Bagdad con muchos de estos integrantes
del CG y de la oposición alentada por EEUU, EEUU les dijo
"gracias, ya no os necesitamos más, marchaos a casa".
La idea era utilizar esa oposición para justificar la
invasión, para que les aportasen una plataforma dentro
de Iraq y luego desprenderse de esa oposición y actuar
ellos mismos. El problema es que cuando los estadounidenses entraron
en Bagdad se dieron cuenta de que lo que pensaban iba a ser una
recepción entusiasta por parte de la población
fue frialdad e incluso resistencia firme. En ese momento se dieron
cuenta de que necesitaban algo más que su propia presencia
para mantenerse en el país y ahí nació la
necesidad de volver a contar con esos representantes de la oposición
y de crear un sistema de gobierno artificial. No hay nadie en
Iraq que no sepa que este CG es un instrumento en manos de la
ocupación estadounidense. Y lo que demuestra la verdadera
función y el grado de dependencia de ese Consejo es que
el máximo representante [de la ocupación] en Iraq,
que es [Paul] Bremer, tiene el derecho de imponer el veto a cualquier
decisión del CG que no sea de su agrado. Esto demuestra
a las claras la verdadera dimensión de este sistema de
gobierno.
Por tanto, todo esto quiere
decir que lo que hace el CG dando la impresión de que
son pasos mal encaminados o errores, en realidad son el cumplimiento
de órdenes dadas por las autoridades ocupantes. Uno de
los ejemplos es el propio documento de constitución temporal
aprobado hace unas semanas [2], en el que a la vista de
las dificultades del Consejo tuvo que ser la propia intervención
de Bremer la que impusiera su firma, amenazando incluso a algunos
miembros con retirarles de las labores de gobierno.
Limitaciones
y logros de la resistencia iraquí
P: ¿En qué
situación está la resistencia? ¿se puede
hablar de un ala política militar y otra más popular
como ámbitos diferentes pero bajo un único mando?
R: No hay una única dirección ni
un único mando, ya sea en el ámbito político,
económico, militar o cultural, y éste e sin duda
uno de los defectos de la resistencia actual. Ahora bien, esta
falta de unidad entre los mandos -y no sólo de un mando
unificado, ya que dentro de cada sector tampoco lo hay-, ¿es
un defecto inherente a la resistencia [iraquí]? Para abordarlo
hay que tener en cuenta una serie de circunstancias y que la
resistencia hace frente actualmente en Iraq a momentos muy difíciles.
En primer lugar, es la primera
vez en la Historia moderna que se conforma un movimiento de resistencia
con tanta rapidez, nunca habíamos visto que en cuestión
de semanas se hubiese organizado una resistencia que estaba haciendo
frente al invasor. En segundo lugar, esta resistencia se está
enfrentando a la mayor fuerza militar en la Historia de la Humanidad.
Y además, para nuestra mala suerte, EEUU ha llegado a
[adquirir] una fuerza militar, un desarrollo tecnológico
y un dominio del mundo que no tenía en otros momentos
en que tuvo que hacer frente a resistencias nacionales como en
Vietnam. Una tercera razón es que ahora mismo, en contraste
con Vietnam, no tenemos un equilibro internacional, bloques o
fuerzas paralelas que puedan contrarrestar en el ámbito
internacional el poder de EEUU. En concreto, la resistencia no
tiene un Mundo Árabe, una Nación Árabe,
una fuerza política árabe capaz de presentarse
como potencia política internacional. Los tiempos del
nacionalismo árabe, del poder de las masas árabes
en la calle, han quedado atrás. Los países del
entorno, desde Turquía hasta Arabia Saudí, desde
Jordania hasta Irán, están prestando de una forma
u otra apoyo a las fuerzas de la ocupación.
Y aún así, con
todos estos inconvenientes, tenemos una resistencia que ha conseguido
más logros en cuanto a hacer daño a las fuerzas
de ocupación que la resistencia en Vietnam durante sus
primeros años [3]. Como ejemplo, tomemos las cifras
de muertos, heridos y suicidios por depresión entre los
soldados estadounidenses; el propio mando militar ha tenido que
reconocer que [las fuerzas de ocupación estadounidenses]
sufren al día una media de 35 ataques por parte de la
resistencia. Pero a pesar de todo hay que tener en cuenta los
logros que se van alcanzando y entre ellos que poco a poco se
van creando unidades en los ámbitos de la resistencia,
que cada vez se avanza en el reagrupamiento de los diversos grupos
de oposición y que esperamos que llegue un momento en
que haya una unificación de todos los mandos de tal manera
que haya una única resistencia bajo una única dirección.
Al-Qaeda
no es resistencia iraquí
P: EEUU insiste en ver la
mano de al-Qaeda detrás de la resistencia iraquí.
¿Qué tiene que decir ante eso? ¿Qué
participación civil popular tiene la resistencia?
R: Es una presunción estúpida e interesada
decir que [la resistencia iraquí] es al-Qaeda. Yo haría
lo mismo si fuese estadounidense: insistiría ahora en
que al-Qaeda o un elemento externo está organizando la
resistencia en el interior de Iraq, por una sencilla razón:
los estadounidenses pensaban que cuando llegaran a Iraq serían
recibidos con abrazos y flores, pero se han encontrado con una
oposición terrible que ni ellos mismos podían esperar
que fuese tan fuerte.
Lo que les interesa ahora es
dar esa impresión de que hay alguien que desde fuera está
organizándolo todo e impidiendo que la población
acoja con optimismo la presencia estadounidense. Hay que tener
en cuenta que al-Qaeda no ha sido la primera acusada; la primera
argumentación [de los ocupantes] fue decir que la resistencia
no era más que los flecos o los restos del régimen
anterior del Ba'az. Pero cuando vieron que no había ni
un solo iraquí que diera crédito a ese tipo de
explicaciones empezaron a utilizar el argumento de al-Qaeda o
el argumento de que había grupos extranjeros, gente infiltrada
que se introducía en el país y provocaba esta situación.
Y tras no haber podido convencer a nadie de que son grupos externos
recurren ahora la idea de [que es] al-Qaeda, como si tuviese
una especie de estructura interior que lo organiza todo dentro
del propio Iraq. Finalmente, cuando vieron igualmente que muchas
de estas explicaciones tampoco tenían éxito entre
la población dijeron que lo que está pasando es
que hay una resistencia religiosa que se concentra en un grupo
religioso, los árabes sunníes, y que se concentra
en "el triángulo sunní".
Pero todo ese tipo de explicaciones,
lo de Sadam Husein, los grupos extranjeros, al-Qaeda, o la resistencia
sunní, comenzó a caer por su propio peso cuando
cayó Sadam Husein y se dieron cuenta de que no sólo
había resistencia en el triángulo sunní,
sino en muchas zonas de Iraq también. Es entonces cuando
los estadounidenses empezaron a hablar de la necesidad de [recabar]
apoyo internacional, de la implicación de Naciones Unidas
[4] y de que los Estados del entorno se implicasen para
poner coto a eso que llaman los estadounidenses terrorismo.
Y del mismo modo que hay que
reconocer que la resistencia tiene algunos defectos, como la
incapacidad para hallar un mando unificado, también hay
que reconocer que es una resistencia iraquí al cien por
cien, que está formada por elementos del interior del
país, sobre todo elementos no confesionales; es ante todo
laica. Y lógicamente, del mismo modo que los estadounidenses
son incapaces de cerrar las fronteras y de impedir que entren
algunos elementos árabes o algunos elementos islamistas,
¿cómo va a poder hacerlo la resistencia? La resistencia
no es responsable de que entren algunos elementos del exterior
y se dediquen a hacer su guerra particular, que no tiene nada
que ver con la guerra de la resistencia, que representa un objetivo
y una serie de organismos y formaciones laicas en primer lugar.
Al-Qaeda no ha sido creada por la resistencia. Al-Qaeda y sus
grupos de islamistas fueron creados por los estadounidenses cuando
los llamaban muyahidines y decían que estaban ahí
[en Afganistán] para combatir el peligro soviético.
Por lo tanto, a nosotros que no nos metan en ese tipo de polémicas
porque es un asunto que concierne a al-Qaeda y a los estadounidenses,
y ellos sabrán qué relaciones han mantenido entre
ellos y qué relaciones mantienen ahora.
La Resistencia
y el "traspaso de poderes"
P: Paul Bremer ha reconocido
que prevén un recrudecimiento de la resistencia a medida
que se avanza en la transición. ¿Hasta dónde
podrá llegar la resistencia?, ¿piensan bloquear
el traspaso de poder en junio?
R: A nosotros nos interesa muy poco el tema del
traspaso de poderes o cómo se vaya a hacer, y ello por
una sencilla razón: porque el propio Bremer en conferencia
de prensa dijo que no hay ninguna relación entre el traspaso
definitivo de poderes y la marcha de las tropas estadounidenses,
que se quedarán en el país independientemente del
traspaso de poderes [5].
Todo el mundo sabe en Iraq
que el CG es un objetivo de las fuerzas de la resistencia, en
tanto que son agentes e instrumento de las fuerzas de ocupación.
Por lo tanto, es un objetivo lícito de los resistentes.
Independientemente de que [los ocupantes] cedan o no el poder,
nosotros consideramos que cualquier medida que se adopte en tal
sentido bajo la ocupación es ilegal. Lo que queremos es
que la ocupación termine y que se tomen decisiones en
un ámbito de libertad y transparencia.
P: ¿Por lo tanto
se puede decir que la resistencia no se detendrá hasta
que se expulse definitivamente a las fuerzas ocupantes?
R: Absolutamente.
Objetivos
de la Resistencia armada
P: ¿Qué objetivos
consideran ustedes objetivos legítimos de la resistencia?
R: Antes de nada hay que decir que la resistencia
iraquí es ante todo una resistencia legítima, no
porque lo digamos nosotros, sino porque todos los documentos
internacionales, el Derecho Internacional, el sentido común,
incluso las leyes religiosas, lo que han hecho los hombres y
lo que han hecho los dioses dan a entender que es lícito
que un pueblo resista a la ocupación extranjera. Estamos
resistiendo al invasor. Nuestros dos objetivos principales son
expulsar a la ocupación y crear un sistema democrático
que permita la reconstrucción del país, rehacer
la economía, asegurar los derechos individuales y colectivos,
rehabilitar los derechos de las mujeres, crear un país
independiente que no esté sujeto a la injerencia exterior;
un país en definitiva democrático, libre y soberano.
P: Cuando le preguntaba
por objetivos me refería a objetivos militares. En ese
sentido, ¿cuál es su límite?
R: Hay que tener en cuenta que en lo referente
a los objetivos militares la resistencia ha llegado ya a un punto
excepcional, el Pentágono reconoce decenas de ataques
al día y miles de heridos y muertos [entre las tropas
de ocupación]. La resistencia ha llegado a atacar al propio
Bremer, a atacar incluso al [secretario de Estado estadounidense]
Wolfowitz [en Bagdad], y todos estos datos son reconocidos oficialmente
por los estadounidenses. La resistencia ha llegado ya a un nivel
en que está en un combate de tú a tú con
los estadounidenses, pero hay que tener en cuenta que no nos
hallamos ante los estadounidenses que había en Somalia
ni ante los que había en Vietnam; estamos ante una fuerza
mucho más asentada y por tanto la resistencia necesita
de mucho más tiempo y mucha más elaboración
para seguir atacando y obligando a los estadounidenses a recular
e ir abandonando poco a poco el país.
P: ¿Todos los medios
son válidos para la resistencia? En un país donde
los ocupantes están tan imbricados con la población
civil, ¿cómo se evitan los daños a los propios
civiles iraquíes?
R: La resistencia se centra en objetivos militares.
Todos los atentados que ha habido contra civiles en los que han
muerto personas inocentes, ya sea el atentado contra la Cruz
Roja, los últimos de Karbala o Bagdad cuando las celebraciones
shi'íes [6], o el de la sede de Naciones Unidas
no han sido obra de la resistencia. Hay que ver [en ellos] la
mano oculta de servicios de inteligencia extranjeros como la
CIA o el Mossad. Esto es algo que ningún iraquí
duda e incluso un dirigente de la importancia del [ayatollah]
Ali as-Sistani lo reconoció y declaró que esos
atentados [de Karbala y al-Kadimiya, en Bagdad] no tenían
nada que ver con los iraquíes, que había sido obra
de alguien del exterior. Y de hecho, después de aquellos
atentados en Bagdad y Karbala vimos cómo la gente salía
a la calle, shi'íes y sunníes hombro con hombro,
profiriendo lemas en contra de la ocupación y diciendo
que todos somos hermanos y que este país no está
en venta.
La falsa
división confesional y étnica
P: ¿Hasta qué
punto la resistencia se está extendiendo del centro sunní
al sur shi'í y hasta qué punto se están
incorporando fuerzas shi'íes a ella?
R: Antes de nada, nosotros nos negamos a hablar
de partidos, de formaciones o de facciones shi'íes y sunníes,
puesto que para nosotros Iraq es una realidad que está
al margen de la división religiosa. Tenemos partidos políticos,
asociaciones, organizaciones... pero no sabemos qué es
eso de organizaciones shi'íes o sunníes.
Hay cosas curiosas que mucha gente no tiene en cuenta, como el
hecho de que un partido, el Ba'az -que ha sido acusado siempre
de favorecer a los sunníes-, antes de ascender al poder
en 1963, en uno de sus congresos regionales nombrase a quince
personas que habrían de dirigir el mando regional [7]
del mismo y que los quince fueran todos shi'íes. Esto
ilustra cómo en aquel momento nadie tenía en cuenta
si se era shi'í o sunní, sino que simplemente se
elegía las personas por otras consideraciones. Es una
norma y una regla que intentamos aplicar ahora.
¿Eso significa que no
hay excepciones? sí, hay excepciones. Tenemos por ejemplo
dos partidos, el Consejo Supremo de la Revolución Islámica
en Iraq (CSRII) y ad-Dawa, que son formaciones religiosas de
orientación shi'í que están [representadas]
en el CG. Pero las evidencias y los documentos nos dan a entender
que estos dos partidos -que sí son eminentemente religiosos-
fueron formados a raíz de la guerra irano-iraquí
por voluntad expresa [del clero] de Irán. Incluso las
formaciones militares de estos dos partidos, sus brigadas armadas,
están integradas por ex prisioneros de guerra iraquíes
que recibieron un trato especial por parte de sus captores [iraníes]
y que se han ido integrando en estas milicias armadas que lo
que hacen es defender la visión geoestratégica
de Irán.
Incluso dentro de la gran comunidad
shi'í hay cientos de miles de shi'íes que están
en contra de la ocupación y que se agrupan en torno a
la figura de Moqtada Sadr [8], que representa a ese grupo
de dirigentes religiosos activos y que se expresan en contra
de la ocupación. E incluso ese espectro de los shi'íes
que pertenecen al grupo dirigente shi'í que nada dice
en contra de la ocupación, representado parcialmente por
as-Sistani, se ha manifestado en contra de la constitución
temporal y ha dicho que es una burla histórica y un gran
peligro para la integridad del país.
La API y
el frente unificado de la resistencia iraquí
P: Ustedes estaban intentando
formar un frente político unificado de la resistencia.
¿En qué punto está ese proceso y qué
relación mantiene la resistencia política como
la Alianza Patriótica Iraquí (API) con la resistencia
más militar?
R: La postura de la API es clara: resistir y oponerse
a la ocupación por todos los medios legítimos a
nuestro alcance. En el ámbito político lo que intentamos
es establecer un frente unido de todas las fuerzas que coinciden
con nosotros en este punto, a fin de formar un grupo de resistencia
política. Estamos avanzando bastante [en esta línea].
P: ¿De ese frente
estarían excluidos los grupos como ad-Dawa o los grupos
kurdos que han formado parte del CG?
R: Hay que tener en cuenta que nosotros diferenciamos
entre grupos políticos y comunidades y también
entre los grupos políticos, sus dirigentes y todos los
cuadros inferiores que forman parte de él. Por ejemplo,
en el caso del Partido Comunista Iraquí (PCI), una cosa
es que estemos en contra de la dirección que ha participado
en este CG y otra cosa es que no sepamos que hay una buena parte,
la mayoría de las bases y los simpatizantes de este partido,
que no están de acuerdo con la ocupación. Una cosa
es que pensemos que los partidos kurdos de ahora están
tomando una actitud equivocada y otra cosa es que no sepamos
que el pueblo kurdo se merece sus derechos y tiene derecho a
conseguir lo que desea, pero dentro de un sistema democrático
no fomentado por la ocupación. Y lo mismo vale para los
dos grandes grupos políticos shi'íes en el CG y
a los que consideramos de formación iraní y que
no representan a esos millones de árabes shi'íes
que forman parte consustancial de Iraq y que no tienen por qué
sentirse representados por dichos grupos.
Evidentemente, un Iraq democrático
y libre no tendría que contar con este tipo de dirigentes
que no representan verdaderamente a sus comunidades y que lo
que han hecho es echarse en manos de los estadounidenses. Yo
querría formular una pregunta a cerca de cómo se
ve en Occidente el CG porque hace diez años, durante la
ocupación de Kuwait, Sadam Husein nombró un gobierno
títere [en Kuwait] y en aquel momento se dijo que era
un gobierno títere. ¿Por qué ahora cuando
los estadounidenses han llegado aun país, han formado
su gobierno, ha impuesto su forma de dirigir el país y
aquí nadie habla de que se trata de un gobierno títere?
¿por qué esa dicotomía a la hora de valorar
una cosa y la otra?
Amenazas
P: ¿Hasta qué
punto su vida cotidiana está condicionada por pertenecer
a la API?, ¿está limitada?, ¿tiene que mantener
condiciones de clandestinidad?
R: Resido en Dinamarca y tengo que decir que el
gobierno me detuvo seis días antes de la caída
de Bagdad; en plena guerra fui detenido por la policía
danesa. En aquel momento, cuando la detención, una docena
de agentes estuvieron trece horas registrando mi casa, desmontaron
desde los muebles al equipo informático buscando pruebas
que me implicasen en lo que la policía danesa decía
que era "colaboración con el enemigo". Cuando
les pregunté quién era el enemigo -estábamos
en planea guerra- me dijeron que el enemigo era Iraq. Querían
aplicarme una pena mayor que la que se aplica en Dinamarca en
caso de asesinato precisamente por colaboración con el
"enemigo". Yo les dije que iba a oponerme a la ocupación,
a luchar contra la ocupación y que incluso que si había
daneses allí implicados lucharía contra ellos.
Al fin y al cabo, llevo 35 años amenazado, viviendo en
el exilio, perseguido por el propio régimen [iraquí]
y considero cada día más que sigo vivo como un
regalo. No estoy ahora para este tipo de amenazas añadidas.
Es un honor para mí y para toda mi familia luchar para
defender nuestro país.
P: ¿Cuándo
se darán condiciones para que pueda volver a Iraq?
R: Hay dos cuestiones que hay que tener en cuenta.
Una es técnica: necesito documentos para entrar en el
país de forma legal y debido a las vicisitudes actuales
la entrada al país se hace por los países del entorno
con los cuales no mantengo una buena relación. Esto no
quita para que no pueda entrar en el país de forma clandestina,
como en los tiempos de Sadam Husein, sin que lo supiesen los
servicios de seguridad. Y los servicios de seguridad estadounidenses
no tienen por qué ser más efectivos de lo que eran
los de Sadam Husein. Pero además hay una cuestión
política añadida, que es que la API y los grupos
políticos a los que pertenezco siguen considerando que
hay una tarea que se debe cumplir en Europa antes de regresar
a Iraq. Pero de todas formas en cualquier momento puedo dejar
Dinamarca y trasladarme a Bagdad en cuanto haya una necesidad
política.
Los atentados
del 11-M
P: ¿Cómo ha
interpretado Usted los atentados del 11 de marzo de Madrid?
R: El pueblo español es un pueblo consciente,
que se opuso a la guerra, que tiene una conciencia y una actitud
muy firme. Condenamos este atentado y no estamos en absoluto
de acuerdo con él. Estoy seguro de que muchos de los que
murieron en esos trenes tenían en sus carpetas alguna
pegatina que decía "No a la guerra", o que sentían
que la guerra de Iraq había sido injusta.
P: Sin embargo buena parte
de los autores de atentados de sello islámico en Madrid
y en otras partes del mundo consideran la causa iraquí
como una causa internacional y reivindican los atentados en relación
a la resistencia y la causa iraquí. ¿eso les perjudica?
R: Sospecho perfectamente quién está
detrás de los atentados de Madrid, y no tienen nada que
ver con quien los ha reivindicado. En un futuro próximo
veremos cómo los atentados van a confirmar la tesis de
que existe una mano extraña detrás de todo esto
que no tiene nada que ver ni con la resistencia ni con la causa
iraquí.
Notas de
CSCAweb:
1. Véase
en CSCAweb: EEUU
y Gran Bretaña vuelven a convocar en Londres a una enfrentada
oposición iraquí para diseñar el futuro
de Iraq tras la guerra y ocupación del país y enlaces relacionados.
2. Véase en CSCAweb: Rubricada la Constitución
provisional para Iraq: libertades formales, ocupación
efectiva
y Comunicado
del CSCA: Detrás de los atentados sectarios de Karbala
y al-Kadimiya, la lógica de los ocupantes
3. Al-Kalamyi se refiere aquí al dato de que el número
de bajas estadounidenses muertas en combate en Iraq por acciones
de la resistencia igualó en los primeros meses de ocupación
a las habidas en los primeros cuatro años de implicación
militar de EEUU en Vietnam.
4. Véase en CSCAweb: Perpetuar la ocupación: las
exigencias del clero shi'í y la decisión de Annan
de 'internacionalizar' la crisis de Iraq - El Consejo Gubernativo
suprime el Código Civil e impone la 'sharia': grave retroceso
en los derechos de la mujer iraquí
5. Véase en CSCAweb: Un acuerdo secreto
entre EEUU y el Consejo Gubernativo iraquí garantizaría
la presencia militar indefinida anglo-estadounidense en Iraq
6. Véase en CSCAweb: Comunicado del CSCA: Detrás
de los atentados sectarios de Karbala y al-Kadimiya, la lógica
de los ocupantes
7. El denominado mando regional de los partidos nacionalistas
baasistas y naseristas se refiere al de cada Estado árabe,
en este caso, Iraq; el nacional corresponde al del conjunto del
Mundo o Nación Árabe.
8. Clérigo shi'í que postula la no colaboración
con los ocupantes, a diferencia de los dirigentes ad-Dawa y el
Consejo Supremo de la Revolución Islámica en Iraq
(CSRII). Según el dirigente de la API, Yaber al-Kubaisy,
as-Sader "Juega un papel ambiguo. Por un lado sus seguidores
de las clases empobrecidas ejercen una presión considerable
sobre él para que se una a la resistencia. [...]Por otro
lado, existe una fuerte influencia iraní sobre él
que opera en otra dirección. Hay que tener en cuenta que
es un muchacho de 24 años. En una sociedad donde la antigüedad
es un valor, él parece virtualmente dividido por las diferentes
fuerzas que intentan arrastrarlo. [...] As-Sader proclama un
día un contra-gobierno y la construcción de un
ejército, y al día siguiente declara que los estadounidenses
son amigos y que la resistencia solo puede utilizar medios pacíficos",
en Entrevista
con Abdel Yabar al-Kubaysi: "El Frente Político de
la resistencia será proclamado pronto"
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