Cada día que pasa, la guerra
en Yugoslavia agrava la situacion de la población civil golpeada
por años de guerra y de privatizaciones provocadas por los dirigentes
nacionalistas serbios. En el momento actual, la responsabilidad de la Unión
Europea, de los EE.UU. y de la OTAN son enormes. En vez de ayudar a la
población del Kosovo, los bombardeos han permitido al gobierno serbio
intensificar la limpieza étnica y multiplicar las masacres en el
Kosovo, reprimiendo a la oposición serbia como un
resultado de su defensa nacionalista.
Pedimos: el cese inmediato de los bombardeos de la OTAN, la apertura de
negociaciones y la busqueda de una solución política que
tenga en cuenta necesariamente las aspiraciones del pueblos y el respeto
a su derecho a la autodeterminación, en un Kosovo multiétnico.
La acogida de los refugiados que lo deseen y su libre circulación
por Europa.
En este momento de guerra y crecimiento
de los nacionalismos dentro de los Balcanes, la corriente autónoma
de la sociedad civil, de los sindicatos y de las asociaciones es un elemento
decisivo para mantener y desarollar la ligazón de la comunidad
basada sobre el dialogo y los valores democráticos y por la recosntrucción
de la solidaridad y de la luchas sociales que superen la división
entre los pueblos. Por esto es que nos comrpometemos, como militantes de
sindicatos y asociaciones, en un proyecto de ayuda al desarrollo
de redes informativas y de discusión para mantener a las asociaciones
y sindicatos
democráticos de quienes
se encuentran en condición de refugiado en el Kosovo, Serbia o en
los Balcanes.
Dos puntos estan en el orden del
día de la Cumbre europea en Colonia los días 3 y 4 de junio:
el primero es la realización de un plan de defensa europea ligado
a la OTAN y el segundo un pacto por el trabajo
lleno de amenazas contra los
parados y los trabajadores de la UE. Para esta reunión de la Cumbre,
la Red de las Marcha europeas, está organizando una serie de iniciativas
que culminaran en una manifestación en Colonia el 29 de mayo.
Para subrayar nuestra solidaridad
con los pueblos de los Balcanes víctimas de la guerra, para denunciar
las responsabilidades, de la OTAN, EE.UU, UE y del gobierno yugislavo,
y en general para manifestar nuestra hostilidad a la lógica militarista,
socialmente nefasta y humanamnte criminal, hemos decidido denominar a la
marcha europea de 1999 como la Marcha contra el paro, la precariedad, la
exclusión, el razismo y la guerra.