La operación 'Zorro del Desierto' ha reforzado
a Sadam
(El Periodico 24/12/98)
JEAN-PIERRE PERRIN (Liberation) París
La operación Zorro del Desierto no está exenta de paradojas,
ya que ha
reforzado el régimen al que quería desestabilizar y debilitar
militarmente. Además,
ha dejado fuera de lugar a una oposición ya muy desacreditada.
Al golpear a la Guardia
Republicana, la guardia pretoriana de Sadam Husein que, en 1991, aplastó
con
increíble ferocidad la insurrección shií del sur
de Irak, Washington demostró claramente que
el objetivo de los ataques no eran exclusivamente los programas de
armas de
destrucción masiva.
Pese a los "desgastes significativos" en los cuarteles de las fuerzas
de élite, en los sistemas de comunicación y en los cuarteles
generales de la mujabat
(policía política), los bombardeos, no han puesto
ni mucho menos de rodillas al
rais . Las cifras oficiales iraquís hablan de 20 muertos
y 69 heridos en los
regimientos de laGuardia Republicana. Los especialistas cifran los
efectivos del cuerpo
entre 50.000 y 70.000 hombres.
Para la oposición, la correlación de fuerzas es la misma
o ha cambiado
poco. Y lo que es peor: el régimen ha aprovechado los ataques
para presentar a la
oposición como "el partido del extranjero". Una parte
de las fuerzas opositoras
se desmarcó de la intervención. El jefe de la oposición
shií, el ayatolá Mohammad
Baqer, condenó severamente los ataques por considerar que "sólo
favorecen a Estados
Unidos y no hacen más que agravar las penas del pueblo musulmán
iraquí".
El Congreso Nacional Iraquí (CNI), que reúne a diversas
formaciones
opositoras, no se pronunció, para no ahondar sus divisiones.
"La oposición es utilizada
por sus disensiones y su falta de credibilidad. El CNI es un magma
donde se
encuentra cualquier cosa: exmilitares, prokurdos, shiís, antiguos
miembros del partido Baas, exmiembros de los servicios de seguridad
y
constitucionalistas monárquicos. Está totalmente
infiltrado por la CIA y sirve para el
consumo interno de Estados Unidos, para demostrar que tiene una alternativa
a
Sadam Husein", dice una fuente occidental.
G Libération