La CIA
desclasifica el documento que justificó la invasión de Irak
La Administración Bush distorsionó
datos esenciales del informe para convencer a los estadounidenses de la
invasión. El informe duda de la presunta
relación entre Sadam y Al Qaeda y niega la posibilidad de armas de destrucción
masiva en Irak. Estados Unidos ha desclasificado el informe de la CIA en el que
se amparó el Gobierno de Bush […]
Estados Unidos ha desclasificado el
informe de la CIA, en el que se amparó el Gobierno estadounidense para
justificar la invasión de Irak en 2003. Se trata de un documento de 93 páginas
cuyos datos o bien eran erróneos, o bien acabaron distorsionados por la
Administración Bush para conseguir el respaldo del Congreso, ya que en ningún
momento confirma que Irak contara con armas de destrucción masiva y expresa
serias dudas sobre la relación entre la red terrorista Al Qaeda y el fallecido
sátrapa iraquí, Sadam Husein.
La Inteligencia estadounidense indicó
que, si bien era muy posible que el régimen iraquí estuviera desarrollando
programas de armamento nucleares, químicos y biológicos contraviniendo las
sanciones de Naciones Unidas, “no se han podido detectar porciones de estos
programas“.
“Irak todavía no tiene capacidad para
crear un arma nuclear, pero podría contar con ella para 2007 o 2009″,
según el documento, con fecha de 2002, y que no puede determinar si Sadam sería
capaz de emplear esa clase de armamento, implicarse en actos terroristas en
suelo estadounidense o, movido por la desesperación, compartir material químico
o nuclear con Al Qaeda (pg. 9).
El documento en cuestión es una
Estimación de Inteligencia Nacional, de 96 páginas, que pretende dar una
valoración general del nivel de peligrosidad que representaba Irak tras los
atentados del 11 de septiembre de 2001.
El informe fue divulgado por vez primera
en 2004, pero estaba tan censurado que se hacía imposible extraer nada en
claro. Esta nueva versión, emitida a petición del bloguero especializado en
seguridad John
Greenewald, descubre porciones adicionales
sobre el supuesto programa de armas nucleares de Husein.
El documento tampoco confirma, en
contra de lo que aseguraron los mandatarios estadounidenses, que Irak estuviera
reconstruyendo su programa de armas biológicas. “Somos incapaces de determinar
si (en Irak) han vuelto a comenzar con las investigaciones sobre esta clase de
agentes”, indica el documento.
El informe, recogido por el magacín
Vice, no se atreve a concluir que Sadam Husein fuera cómplice de Al Qaeda.
“Cualquier información en este sentido es de segunda mano”, zanja el documento,
“no solo en términos generales, sino en la posibilidad de que (Sadam) esté
entrenando a operativos o proporcionando material“.
“No conocemos hasta qué punto Bagdad
es partícipe activa del uso de su territorio por parte de Al Qaeda para refugiarse”,
añade. Por contra, el entonces secretario de Defensa, Donald
Rumsfeld, proclamó que los servicios de Inteligencia contaban
con “evidencias a prueba de balas” de la relación entre Husein y la red terrorista,
“así como de la presencia de miembros de Al Qaeda en Irak”.
Sobre la supuesta cooperación de Husein
con el régimen talibán y Al Qaeda en Afganistán El documento señala que una
de las principales “fuentes” de los servicios de Inteligencia, Ibn
Shaij Al Libi, declaró en su momento que “Irak
nunca envió sustancias químicas, biológicas o nucleares a Al Qaeda” en el
país centroasiático. Al Libi se suicidó en Libia en 2009, en extrañas circunstancias,
solo un mes después de reunirse con investigadores sobre Derechos Humanos.