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Declaración con motivo de la Conferencia de Paz El compromiso de Elkarri se resume en una palabra: Igualdad Entre octubre de 2001 y marzo de 2002, elkarri promueve un proceso de
Conferencia de Paz. El objetivo es lograr un acuerdo sobre el camino que puede recorrer
esta sociedad, con todas sus sensibilidades políticas, para superar los problemas que hoy
le atenazan. Este proceso ofrecerá un método para estudiar las posibilidades de consenso
político, propiciará un clima de reflexión constructiva y creará un espacio de
participación social. elkarri no fija contenidos políticos. Ahora bien, como convocante,
tiene la obligación de señalar una línea de salida del proceso. Aquélla a la que
convoca y que, al menos conceptualmente, podría ser lugar de encuentro previo. Esta
propuesta de inicio debe representar, también, una manifestación transparente del
compromiso de este movimiento social. Es decisión de elkarri que este principio pueda
comunicarse en la simplicidad y potencialidad de una sola palabra: Una palabra que represente fielmente la intencionalidad de elkarri
de inicio a fin con el proyecto de Conferencia de Paz. Una palabra que englobe, sea sinónimo o pueda asociarse a lo
mejor del ser humano y de su capacidad de convivencia. Una palabra que no provoque rechazo y deje, por tanto, una puerta
abierta a un mínimo de expectativa para la confianza en todas las tradiciones políticas. Una palabra que produzca una resonancia de solidaridad y humanidad
en los sufrimientos extremos causados por la violencia y las agresiones a los derechos
humanos. Una palabra que conecte culturalmente con el pálpito de nuestra
sociedad, por ser comprensible, integradora y constituir signo de civismo indiscutido. Una palabra que sea «nueva», no por inventada, sino por no estar
agotada y ofrecer posibilidades de renovación. Una palabra que pueda compartirse como línea de salida, regla de
juego, y primer punto de encuentro para el entendimiento. «Igualdad»: principio que reconoce a todos los ciudadanos capacidad
para los mismos derechos. Igualdad, ésta es nuestra opción. Esta palabra resume nuestro
compromiso, define el principio rector de la Conferencia de Paz y propone un primer marco
de coincidencia y de confianza. En el contexto de la Conferencia de Paz, la palabra
igualdad engloba tres significados: -Igualdad de condiciones vitales, para proteger los derechos humanos
fundamentales de todas las personas. -Igualdad de condiciones políticas, para representar todas las ideas e
identidades en libertad. -Igualdad de condiciones democráticas, para materializar todos los
proyectos políticos según las mismas reglas de juego. La palabra igualdad representa los más claros progresos humanos a lo
largo de la historia. Cada vez que profundizamos en igualdad avanzamos como humanidad.
Desde la abolición de la esclavitud, hasta el respeto a la pluralidad y al
multiculturalismo, pasando por la justicia, la democracia o los derechos y libertades, lo
alcanzado y lo pendiente está directamente relacionado con la compresión de lo que hace
a todas las personas ser de una misma condición humana. También, ahora, aquí, en
nuestra realidad la palabra y el principio de igualdad puede tener una fuerza renovadora y
transformadora. La palabra igualdad es principio rector. Su aspiración máxima es ser la brújula de un proceso completo de confianza y de consenso: punto de partida, punto de llegada y regla de juego; propuesta de convenio mínimo, alternativa y oportunidad. La palabra igualdad representa el compromiso y la finalidad de elkarri. La Conferencia de Paz es un proceso para compartir el principio de igualdad.
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